El día de la Pachamama
En las antiguas cosmogonías de los Andes, especialmente en las regiones del noroeste argentino, Bolivia y Perú, la Pachamama es venerada como la deidad máxima: mujer, madre amable, fuerza fecundadora y protectora, pero también poder absoluto que necesita respecto y honor para poder gozar (1) de sus beneficios. De hecho, puede asimismo resultar hostil a quienes desobedecen las leyes de la naturaleza.
El término es de origen aymara/quechua: «pacha» significa universo, mundo, tiempo, lugar y «mama» madre. Por eso, se la considera una diosa relacionada con la tierra, la fertilidad y lo femenino: la diosa de la naturaleza. Cuando nos encontramos en la oscuridad de las quebradas (2), valles y montañas de los Andes tan cerca del cielo, bajo un manto de estrellas, el rayo, la lluvia, el viento, la alfombra natural, cada elemento toma semblanzas divinas. La Pachamama es la más popular de las creencias mitológicas del ámbito incaico andino y, aún hoy, se practica su culto y se le pide sustento y disculpa por las faltas cometidas en contra de la Tierra.
El culto a la Pachamama se celebra durante todo el año, pero el uno de agosto es el principal día de fiesta. Este día es llamado la «corpachada». Corpachar significa darle de comer y beber a la Madre Tierra. Esta ceremonia llamada también «challado» abarca una compleja serie de pasos rituales que comienzan en las viviendas familiares la noche de la víspera, durante la cual se cocina una comida especial, la tijtincha. De hecho en ese día se paga a la Pachamama la «challa», es decir, el tributo: se entierra en un lugar cerca de la casa la olla de barro con la comida cocida y en este lugar se realiza el ritual principal basado en una serie de ofrendas de hojas de coca, yicta (3), alcohol, cigarros y chicha (4) para alimentar a la Pachamama.
En algunas culturas ese día hay que ponerte un amuleto hecho con cordones de hilo blanco y negro de la lana de llama hilando hacia la izquierda. Luego hay que atar los cordones a los tobillos, a las muñecas y al cuello, para evitar formas de castigo. En el norte de Argentina, la ceremonia incluye la limpieza de la casa, el pueblo junta toda la basura en las esquinas, luego la colocan en una pala y le agregan plantas de la zona (chacha y pupusa), se quema el todo y con esta pala se ahúman todas las casas, las cosas y también a los integrantes de las familias como forma de bendición. Estas son las tradiciones ancestrales de la fiesta pero hay también muchas otras actividades organizadas por los ciudadanos, las universidades y las asociaciones por ejemplo se hacen espectáculos artísticos y musicales que combinan el arte textil, el canto de los pueblos originarios, instrumentos y percusiones folclóricas.
La Pachamama no posee lugares oficiales de culto, pero es común observar en los caminos por valles y quebradas algunas zonas llamadas apachetas (5) en donde es posible ver piedras apiladas formando montículos, alrededor de los cuales se depositan los obsequios para obtener los favores de la Pachamama.
Notas:
1) gozar: godere
2) quebrada: gola tra montagne e valli
3) yicta: impasto formata da ceneri di piante e fecola di patate
4) chicha: bevanda alcolica a base di mais
5) Apacheta: cumuli di pietre posti sui passi andini
Nivel: C1
Objetivos del Marco Común Europeo de Referencia
Comunicación
El alumno es capaz de enfrentarse a cualquier tipo de texto que trate tanto temas concretos como abstractos, incluyendo debates técnicos dentro de su especialidad y dispone de los recursos lingüísticos y no lingüísticos necesarios para participar en los intercambios comunicativos con un grado de fluidez, precisión y naturalidad.
Cultura
El alumno es capaz de manejar informaciones relevantes y reflexionar acerca de temas actuales utilizando un repertorio lingüístico amplio, suficiente para expresarse.
(por Paola Donatiello con la revisión lingüística de Marta Lozano Molina)