¿Dónde alojarse en las vacaciones?
Se acercan las vacaciones de verano. Hay quienes que llevan semanas o incluso meses planeándolas(1) al detalle. Otros aprovechan las ofertas de última hora(2) para decidir dónde van a pasar unos días de descanso(3). Pero hay algo seguro: todas estas personas tienen que encontrar un lugar para alojarse.
España es uno de los países de Europa –y del mundo– que más visitantes atrae gracias a su buen tiempo, playas y lugares de interés artístico. El turismo es una de las principales actividades económicas de España y su infraestructura turística está muy desarrollada(4). Por eso, existe una gran variedad de alojamientos para todos los gustos y bolsillos(5). Pueden dividirse en alojamientos urbanos y rurales o en la naturaleza.
En primer lugar encontramos los hoteles, que son los más habituales y conocidos. Pueden estar en la ciudad o en el campo. Se clasifican por número de estrellas(6) (de 1 a 5) según sus comodidades y servicios. Pueden ofrecer solo alojamiento, alojamiento y desayuno, media pensión (desayuno y cena) o pensión completa (desayuno, comida y cena). Muchos hoteles disponen de desayuno tipo bufé(7), es decir, presentan los alimentos en mostradores y cada comensal puede elegir lo que quiere más de una vez. Normalmente, las habitaciones cuentan con cuarto de baño propio, televisión, caja fuerte(8) y una pequeña nevera. Dentro de esta categoría, se encuentran los complejos turísticos o resorts, que ofrecen piscinas, balnearios, zonas deportivas y entretenimiento de todo tipo.
Por otro lado, los hostales o pensiones son establecimientos más económicos que un hotel convencional. Suelen estar regentados por familias y cuentan con menos habitaciones y servicios. En ocasiones, cuentan con baños compartidos fuera de las habitaciones.
Fuera del ajetreo(9) de las ciudades encontramos las casas rurales(10), normalmente en pueblos o zonas de montaña. Muchas suelen encontrarse en casas tradicionales que han sido restauradas para tal fin y tienen un encanto(11) especial. Suelen tener amplias zonas ajardinadas, huertos o incluso animales. Ofrecen, sobre todo, la calma que no se encuentra en las ciudades.
Una opción más económica para alojarse en el campo es el camping. Son grandes parcelas de terreno donde se pueden aparcar caravanas(12) o autocaravanas o instalar tiendas de campaña. Cuentan con duchas y baños de uso común, zonas para hacer barbacoas, etcétera. Algunos también ofrecen cabañas(13) con camas y una pequeña cocina.
Por último, entre los mochileros(14) son muy populares los albergues(15). Estos alojamientos ofrecen habitaciones de uso compartido, normalmente con literas. Los baños y las zonas comunes también son de uso compartido. Este tipo de establecimientos buscan fomentar la convivencia entre los huéspedes.
Notas:
1 planeándolas: pianificandole |
9 ajetreo: trambusto |
Nivel: A2
Comprensión: Asimilar textos breves y sencillos que contienen vocabulario común y expresiones frecuentes Localizar información específica y aislar la información requerida.
Comprensión: Reflexionar las alternativas de alojamientos turísticos y ampliar el repertorio de léxico referido al tiempo libre y las vacaciones.
(por Marta Lozano)